Jara Velilla, egresada de Publicidad y Relaciones Públicas de la Universidad San Jorge, lleva cuatro años en la sede mundial de Adidas en Alemania creando la estrategia de marketing y la creatividad de las campañas de fútbol a nivel global.
La historia de Jara Velilla comienza cuando una lesión jugando al fútbol la mantuvo dos semanas de baja. Durante ese tiempo aprovechó para actualizar su currículum y bucear en la web de Adidas, porque sabía que las oficinas de España estaban en Zaragoza. “Vi un puesto de Global Marketing Manager Football en Herzogenaurach (Alemania) y envié mi solicitud sin ni siquiera buscar en el mapa dónde estaba esa ciudad de pronunciación imposible”, recuerda.
Tras graduarse en Publicidad y Relaciones Públicas en 2010 por la Universidad San Jorge, pasar por diferentes agencias en Madrid durante cinco años, especializarse en marketing digital y cursar el máster en Administración y Dirección Deportiva en el Comité Olímpico Español, Jara consiguió un puesto en Herzogenaurach, cerca de Núremberg, en Alemania, para crear la estrategia de marketing y la creatividad de las campañas de fútbol de Adidas a nivel global. “La campaña de lanzamiento del balón del Mundial 2018, hacer a Mohamed Salah correr por el agua para demostrar que nuestras botas son las más rápidas o celebrar por todo lo alto que Messi es el GOAT (Greatest Of All Time) son proyectos que para una apasionada del fútbol como yo parecen un sueño”, recuerda la antigua alumna.
Experiencias y aprendizaje
Además de los éxitos profesionales, sus proyectos le han llevado a poder asistir a eventos que, según afirma, nunca hubiera imaginado, como ver al Real Madrid ganar la final de la Champions League en Cardiff en 2017, presenciar la final del Mundial 2018 en Moscú o ver a Xabi Alonso despedir su carrera futbolística en el Allianz Arena.
“Cada vez que vuelvo a casa, lo primero que veo al entrar en Villanueva son los edificios de la USJ y el estadio donde demostraba mi pasión por el fútbol. Entonces mi mente hace un repaso cargado de buenos recuerdos y me doy cuenta de lo afortunada que soy y de cómo hay que perseguir tus sueños por imposibles que parezcan”, concluye Jara.